Me abandonas
y la noche tiembla.
!Oh amor!
te me alejas
y se vierten las estrellas y la luna.
Lanzas una piedra
y el agua provoca una conversación inútil
de ondulaciones sin sentido.
Oprimes mis manos,
y mi cuerpo se anuda al viento desbocado
y a la furia.
Viejo y
loco
y prolongado gozo de vaivén y espuma.
Cuando
se rompe el aire
te arremolinas entre mis dedos
y como la arena, mil veces te desmoronas.
Pero yo,
a la espera de tu incrédulo regreso.
Y tú,
desparramado en la noche
entre luceros blancos
y ¡Ay! yo,
me aíslo en cálido interior.
Maribelflores (verano de 2011)
Desde tu cálido interior gimen tus versos con guitarras caídas junto a tu corazón. Saludos
ResponderEliminargracias Funambulus, siempre fiel, siempre animándome.
EliminarUn abrazo.
Qué poemazo, Maribel... Me encantó.
ResponderEliminar"Me aíslo en cálido interior"
Si, solemos hacerlo cuando el amor nos abandona.
Tal vez así podemos recuperar sensaciones y nos adormecemos en un rumor de ecos que nos devuelven al amanecer al mundo de su ausencia.
Impresionante poema, qué fuerza tiene.
Besos
Verónica gracias por tu efusividad y por tu aliento, y por tu amistad. Todos tus comentarios son una buena colección de halagos.
EliminarUn abrazo Maribel.
Maribel,has convertido a la noche en un mar de metáforas,donde las estrellas y la luna se hacen agua...y se mueven con el viento y te van enredando en tus recuerdos,en la nostalgia de la vida,que va y viene y nos lleva por delante...Te haces noche y te bebes sus luces y sus sombras,clamas con el viento y después te acurrucas en un sueño de luna...Un poema sencillamente mágico,yo diría que es todo un ritual,que te permite descansar,después,en tu interior...
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo enorme por tu cercanía y tu maestría en la forma y en el fondo.
FELIZ JUEVES,MARIBEL Y BIENVENIDA DE NUEVO.
M.Jesús
Mantener ese interior cálido es la defensa contra la ausencia, se sufre, se desespera, pero siempre volvemos a nuestro refugio, nuestro interior.
ResponderEliminarHermoso Claribel.
Un beso
Bella bitácora envuelta en deseos y sentimientos que encierra las imágenes en un aislamiento ¡Tan cálido! Como el amor a nosotros mismos en brazos de la esperanza. Beosos Maribel
ResponderEliminarRecuerdos que en la noche vienen a visitarnos, un gozo de vaivén de espuma se hace nostalgia esperando su regreso…
ResponderEliminar¡Hermoso poema!
Un cálido abrazo Maribel
Sneyder gracias por tu visita y tus bonitas palabras.
EliminarSi terminamos aislandonos a modo de hibernación creyendo que escaparemos del dolor que supone una pérdida amorosa. Al final al llegar la noche se manifiesta de nuevo a nuestro lado. Al menos ha valido para crear un bellisimo poema. felicidades Maribel y un gran beso. Ahhhh y bienvenida jajaj.
ResponderEliminarSiempre nos queda ese refugio interior, íntimo, nuestro. Lo demás es demasiado efímero...
ResponderEliminarUn poema muy bello.
Un abrazo
El interior es como nuestro reflejo en el interior de un espejo. Es el desván del silencio y el amor desjajado del alma. Así, que cada noche espero, el amanecer que nos trae el tumulto, la esperanza y el arpa. Ya galopo hoy por un campo de dalias y semillas de lluvia.
EliminarUn beso.
En el amanecer está la esperanza, y a ella debemos de dar la mano para comenzar el día. Me ha gustado mucho tu poema maribel, enhorabuena. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ResponderEliminarhttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/